Una noche mágica, la de ayer. Te das cuenta de que va a ser una fiesta inolvidable mucho antes de que comience. Cuando te llama esa persona a la que no veías desde hace ya cuatro meses, y a la que has echado tanto de menos.
Qué lejos queda Andalucía.
Y, de repente, cambias tus planes para verla. Porque te mueres de ganas de hacerlo. Y quedáis en una calle que es tan tuya y que ahora os ve abrazaros, sonreír, volver a abrazaros. La vida es un continuo abrazarse y sonreír, para vosotros, esa noche.
En Titus, la discoteca en la que viviste tus primeras borracheras, a la que fuiste por primera vez, cuando apenas sabías lo que era todo aquello. En Titus culmina la celebración de un retorno, esporádico y adolescente. Pero un retorno, al fin y al cabo.
Nos veremos en Navidad, Aroa. Te quiero.
posdata: un placer haberte conocido, Álex; reitero lo dicho ayer sobre ti.
2 reacciones:
me alegro que te lo pasaras tan bien! ^^
Lo menos planeado es lo que mejor sale, que rico que lo hayas disfrutado...
Saludos
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